Phoenix canariensis Chabaud
ArecaceaeLa canaria es una palmera de tronco grueso y vertical que difícilmente supera los 12 metros de altura. Las primeras noticias de esta palmera, de la cual se extraía ya entonces miel de palma, proceden de las exploraciones a Canarias de Juba II (50 a.C. – 23 d.C.), rey de Numidia, a quien estas islas deben el nombre. Sin embargo, dichos descubrimientos, celebrados antaño tanto por Plinio el Viejo como el Joven, cayeron en el olvido, aunque probablemente los expedicionarios de Magallanes se encontrarían con ejemplares de estas palmeras en su primera parada del viaje en Canarias, a finales de septiembre de 1519.
Para tener nuevas noticias sobre estas palmeras fuera del archipiélago canario debemos esperar al vizconde Vigier, antiguo oficial de Napoleón III, casado con una cantante de ópera y apasionado de la horticultura, quién la introdujo en Niza hacia 1865 al plantarlas en la villa que se hizo construir. Así, el cultivo de la palmera canaria se extendió desde Niza por toda la Riviera francesa en un momento en que esta región se estaba convirtiendo en uno de los destinos turísticos favoritos de la clase alta europea. Perteneciente a esa élite, buen conocedor del Mediterráneo y muy al tanto de las corrientes de jardinería de la época, Antonio de Orléans, duque de Montpensier, se preocupará de dotar a posesiones como la suya de Sanlúcar de Barrameda de palmeras, elemento fundamental para evocar ese exotismo que tanto gustó a la jardinería romántica y al propio duque.